Los Campeones

Los históricos analizan a los campeones

Hugo Orlando Gatti, Carmelo Simeone, Julio Meléndez, Roberto Mouzo, Enrique Hrabina, Norberto Madurga, Antonio Rattín, Alberto M. González, Alberto Márcico, Sergio Martínez y Francisco Varallo. Son ilustres con un reconocido pasado azul y oro. También supieron lo que es ser campeón y hoy hablan sobre sus herederos.

Oscar Córdoba: Fue uno de los pilares de este Boca campeón y es uno de los mejores arqueros del fútbol argentino. Con él, Boca tiene el arco cubierto por diez años más. En su mente, Oscar tiene un circo y en su cara, refleja seriedad. No es de los número uno que les guste quedarse bajo los tres palos, él quiere jugar antes que atajar. Y en nuestro fútbol, donde hoy no hay modelos a seguir, Córdoba es lo que es sólo por sus grandes condiciones.

Por Hugo Orlando Gatti

Hugo Ibarra: Es un jugador con muchas condiciones. No es de los típicos defensores con garra que siempre se destacaron en Boca. Pero posee grandes cualidades técnicas que lo convierten en un gran jugador. Cuando se proyecta exige al rival y demuestra que sabe manejar muy bien la pelota. Esta linea de cuatro que ideó Bianchi es muy distinta de la que formábamos allá por el 64. Nosotros éramos jugadores de más marca y presión. Los defensores actuales son más técnicos. Ibarra es un ejemplo de ello. No tengo dudas de que su juego va a seguir creciendo partido a partido.

Por Carmelo Simeone

Jorge Bermúdez: Un ganador. Así se lo puede definir a Bermúdez. Tiene un gran espíritu de lucha y una entrega envidiable. Para los delanteros es una pesadilla: va bien arriba, es muy fuerte en la marca y tiene un gran anticipo. Su nivel en Boca es muy superior al que mostró en el Mundial con Colombia, donde tuvo algunos altibajos. Pero en Argentina está demostrando su verdadera jerarquía. No es fácil ser extranjero y destacarse en Boca; lo digo por experiencia. Aquí, a la distancia -está radicado en EE.UU. desde 1990-, sigo siempre a Boca y me siento festejando con la mitad más uno.

Por Julio Meléndez

Walter Samuel: Sólido y confiable, Walter Samuel parece un "veterano" por su ubicación y seguridad. Pero sólo tiene 20 años. Por como juega, como marca y como pone el cuerpo da la sensación de ser un jugador muy experimentado. Está consolidado y creo que Boca no se tiene que desprender de él, por lo menos durante un par de años. Es un jugador clave para este equipo. Y con Bermúdez forman un dupla bárbara. Se entienden a la perfección, como yo me entendía con Pancho Sá, aunque ellos marcan en zona y nosotros hacíamos hombre. Es un excelente jugador con un futuro enorme.

Por Roberto Mouzo

Rodolfo Arruabarrena: Tiene unas condiciones bárbaras para jugar de lateral izquierdo. Cumplidor en la marca, posee un muy buen manejo de pelota, es un gran cabeceador y tiene decisión para pasar al ataque. Un jugador completo. Y posee un temperamento muy fuerte. Personalmente me alegro de que el Vasquito se haya afianzado en el equipo, porque lo dirigí en la reserva y fue uno de los jugadores que promocionamos a Primera. Es un excelente profesional y, por sobre todas las cosas, un gran pibe. Se merece este presente.

Por Enrique Hrabina

Diego Cagna: Es el claro exponente del volante con sacrificio con llegada al área rival. Con un estado físico impresionante, se convirtió en el pulmón del equipo. Y aunque no vislumbre, es un jugador fundamental para la estructura de Boca. Comparándolo con mi juego yo no no tenía el quite ni la dinámica de Diego. Lo mío pasaba más por el toque y el gol. Otro aspecto fundamental en Cagna es su perfil bajo. Aunque personalmente no lo conozco, parece muy ubicado y siempre mantiene la humildad. Nunca tuvo problemas con nadie. Y eso es para destacar.

Por Norberto Madurga

Mauricio Serna: El caudillo del campeón. Con un gran despliegue físico, siempre está listo para ayudar a sus compañeros cuando lo necesiten. Es uno de esos jugadores que transpiran la camiseta, ideal para jugar en Boca. La gente le reconoce su esfuerzo y ya lo tomó como un ídolo. Por algo la hinchada le canta "Chicho, Chicho, Chicho, huevo, huevo, huevo". La "12" pocas veces se equivoca. Le gustan los jugadores con esas características. Serna, además, sabe con la pelota. Y hace pesar su experiencia para adueñarse de la mitad de la cancha.

Por Antonio Rattin

José Basualdo: Es un muy buen jugador. La definición es sencilla, pero resulta la más exacta. El aporte del Pepe Basualdo al equipo no es sólo su experiencia. Su claridad para ver los partidos y la pausa que le imprime al equipo son otras razones que le permiten ser titular en este plantel campeón. Porque, de alguna manera, él resucitó. Y en esa resurrección mucho tuvo que ver su capacidad para interpretar las necesidades del entrenador. Bianchi confió en Basualdo. Y el Pepe lo supo aprovechar.

Por Alberto M. González

Juan Román Riquelme: Es un jugador fantástico. Uno de los mejores del fútbol argentino. A veces queda la sensación de que está pasado de talento. Además, no se le puede vislumbrar un techo. Y si tuviera gol ya sería un consagrado. Su pegada, su panorama y su precisión son las tres virtudes más evidentes que suele mostrar. Es un futbolista fino, capaz de hacer jugar a un equipo alrededor de él. Todavía tiene tiempo para seguir creciendo. Y estoy seguro de que mejorará. En este exitoso presente de Boca, él tiene bastante que ver.

Por Alberto Márcico

Guillermo B. Schelotto: El Mellizo es un jugador muy importante para este Boca. El es el complemento ideal para Palermo. De hecho, le ha facilitado a Martín varios de sus goles. Tiene además de capacidad de desborde, facilidad para enganchar hacia el medio. Si lo dejaran, eludiría a todo el mundo. Por su habilidad es un jugador difícil de marcar para cualquier defensor. ¿Un defecto? Es un jugador muy "calentón". En esto tiene que ver lo mucho que le pegan.

Por Sergio Martínez

Martín Palermo: Cuando llegó a Boca no pensé que tendría el rendimiento que está mostrando. Ahora estoy convencido de sus condiciones. Su capacidad en el juego aéreo no se la vi a ningún otro jugador. Ni a Erico ni al Charro Moreno. Además es in jugador inteligente, oportuno, solidario con el equipo. Y tiene otra virtud que le permitirá seguir creciendo: está dispuesto a aprender. Tiene el futuro garantizado. Sería una lástima que se fuera de Boca.

Por Francisco Varallo